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viernes, 20 de enero de 2012

ÍBEROS: VALLE DE RICOTE.











         

VALLE DE RICOTE.

   Archena pueblo de pueblos:  Algáricos  romanos árabes todos dejaron tu huella en ti. Pudieron ver tu Pico Almeces de más de mil metros y bañarse en tus aguas termales.

LOS  IBEROS. VALLE DE RICOTE.
Hace 3.800 años.
   -el poblado Ibero estaba sufriendo una terrible tormenta. Los más de trescientos  habitantes dejaron sus casas y se subieron a un montículo  que tenía una gruta  grande en la roca que ya habían usado otras veces para protegerse.
    - el jefe de barba blanca  se subió a una piedra y les hablo.
    -oídme todos; Tenemos que irnos de este emplazamiento. Llevamos varios años aquí. Desde que nos peleemos con los celtas, ese pueblo que vino de muy lejos poderoso, culto, amantes de la danza  la cultura, la música, que tocan el instrumento de la gaita,  que nos trajeron el hierro  y el conocimiento del latín: Los mayores os acordareis que si nos peleamos con ellos fue sobre todo porque sus temidos guerreros se querían llevar a nuestras hijas y mujeres.
  - si claro que nos acordamos. Dijo uno mayor que llevaba un bastón  lleno de dibujos de animales. Ellos querian hacer un imperio más grande y según ellos nosotros  somos una raza capaz de evolucionar por nosotros mismos, así que nos consideran aptos para mézclarnos con ellos. Yo le dije a tu padre de quedarnos allí
  -un momento. dijo levantado la mano el que defendía todas las causas. Nosotro decidimos irnos porque los pueblos y las personas son libres. son libres. ¿A sarber como les ira a los que se quedaron?
  - bueno corto el jefe. El caso es que ecapamos de ellos. pero ocurre  que  cada vez estamos peor. Hemos tenido   sequias, hemos perdido casi todo el ganado. Los bueyes, los cerdos y las ovejas muchas de ellas murieron de sed el verano pasado que fue horrible  y nos quedan pocos caballos. ¡Tenemos que marcharnos!.
  í  
  -¿si?, ¿ pero adonde?. Contesto un artesano que estaba respaldado en una roca  y que tenía una mancha en la cara.. Recuerda. -Se dirigió al jefe. Que nos quedemos aquí porque no pudimos seguir a causa del  pueblo que se hacían llamar los Argáricos y que Vivian en los montes, esos que trabajaban el bronce, y que más parecían fantasmas nos impidieron el paso. ¿y si siguen allí todavía?.
   -el jefe iba a contestarle. Pero vieron  subir por la cuesta entre la  lluvia y el barro a un jinete a caballo; y tirando de una cuerda a otro caballo que traía dos personas  balanceándose y se bajo donde estaban todos resguardados. Y hablo.
  - aquí traigo a dos cazadores que han muerto..
 -del grupo salieron algunas personas que rodearon desconsolados a los muertos. Eran sus familiares y los introdujeron dentro de la cueba.
  -la sacerdotisa que vestía una mantilla de lana blanca y un vestido de lino de color rubio. Tela ésta más fuerte que el algodón. Se acerco y llamó a los danzantes a que cantaran la danza que les permitiría a esas dos personas ir al otro mundo.
   -para eso tendrían que llamar al espíritu del Dios buitre  que era el llevaban a los guerreros muertos al mundo  de los Dioses.
  -todos participaron del ritual menos uno que  estaba sentado en un tronco. El jefe lo miraba. En una  mano sostenía algo. Era de un barro especial que tardaba en secarse y con la otra mano sostenía un palito, y con el perforaba en el barro extraños símbolos. A él le llamaban  “el que le falta un ojo”. El mismo se lo hizo yendo a caballo con una rama, mientras dibujaba abstraído en sus tabillas: Era una habilidad que había heredado de sus padres y cuando ya tenía varias de esas tablillas que solo algunos jefes y sacerdotes sabía traducir, las dejaba escondidas en sitios fáciles de encontrar. Él le llamaba escritura  Allí decía él estaban nuestras vidas y aquello nos gustaba a todos.
   - en la ceremonia se hizo el silencio. La sacerdotisa se acacho delante de los muertos y empezó a mover los brazos y un tintineante sonido se extendió por la cueva. Lo producían sus pulseras y collares hechos de diferentes materiales, de piedra de bronce, de oro. Que ritualmente llevaba en sus brazos. Y  al ritmo se  balanceaban sus largos pendientes de plata.
  - Todos fueron quedando  como hipnotizados, y cuando se hizo el silencio cayo un  potente rallo   muy ceca. Ilumino  las rocas, los arboles la cueva, sus caras. Entonces sonó un tremendo sonido que hizo vibrar aquel montículo de piedra
  - los sacerdotes se juntaron e invocaron a los Dioses. Pidiendo comprender aquella señal.
  -la sacerdotisa salió a mirar fuera. Quizá pudiera ver el espíritu del cuervo, pero lo que vio es que llluvia había cesado y las nubes se abrieron y dejaron ver el sol.
  - con cuidado bajaron los dos cuerpos al poblado. Buscaron las ramas más secas y las  amontonaron.
  -los familiares trajeron algunos objetos. Punzones, lanzas, dos monedas de mezcla de plata y oro y otras de bronce.
    -la Sacerdotisa entró a su cabaña y se puso una mantilla negra  que destacaba sus ojos claros. Luego se acerco entre charcos  a la casa  colectiva acompañado de un artesano que le ayudo a sacar una caja de cerámica decorada con un lince, símbolo de la muerte y que terminaba como patas en forma de garras
  -en ella introdujeron las cenizas y lo enterraron en un foso excavado en la tierra junto con sus pertenencias que habían traídos sus familiares.  Después del entierro el jefe les volvió a hablar.  -bueno pues bien hoy hemos perdido dos personas y caballos;  y  mañana ¿qué más perderemos?.   -¡Si nos quedamos aquí moriremos todos!. Así que he decidido que mañana a primera hora tengamos todo preparado para marcharnos.   -  -esta vez todos callaron y se fueron quehaceres.

  por la noche al jefe lo despertó su mujer.
  -¿es que estás despierta?
  -sí, es que no puedo dormir pensando en mañana. Adonde iremos.
Pues he decidido que cruzaremos la montaña lejana.
  - Y si nos encontramos con los otros guerreros.
  - no te preocupes le. Le dijo enseñándole las armas. Fíjate en estas dos hachas  de bronce  y en estas lanzas, los arcos y esta espada de hierro terriblemente fuerte. Nos defenderos hasta la muerte.
    -levantó la puerta de cuero  salió de la casa y llamó a dos guerreros y los mandó a donde se iniciaba la ascensión. Y recordar tenéis que esperar al pie de las montañas si no hay peligro nos esperáis allí  y no hagáis fuego y otra cosa que pueda llamar la atención a nadie.
   -se marcharon cuando aún se vislumbraba la luz del sol, y también el poblado empezó a animarse.. Las gentes desmantelaban el lugar
cargando  sus ánforas y algunos vasos con ansas múltiple en los pocos animales que les quedaban y el resto lo llevaban ellos mismos.
  -todos se juntaron y la fila de gente su puso en marcha. Sus pies los llevaban buen cubiertos habían cambiado las sandalias de esparto por las botas de piel y pelo de animal. Y debido al frio y a la humedad se habían puesto la capa de lana que les protegía.   
     -el primer día iban descansados y fue bien, pasaron la noche sin lluvia durmieron en sus pieles y al día siguiente emprendieron la caminata.
  -el  jefe y un guerrero se adelantaron a caballo hacia la montaña.
 - allí le esperaban los dos soldados qué él había mandado para reconocer aquello,  que al verlo llegar entre los árboles se acercaron a él.
   - no hemos visto a nadie le dijeron. Todo ha estado tranquilo.
   -está bien. Él que se quede aquí y tú te vienes conmigo. Así lo hizo el guerrero y los dos retrocedieron hasta tropezarse con el grupo.
  - el jefe observo la larga fila, y también que las mujeres y los niños estaban cansados. Los sacerdotes iban muy despacio. Los artesanos que algunos llevaban bultos y vasijas pequeñas encima también estaban cansados.  Miro el sol aún quedaba mucho día. Así que se acerco con el caballo hacia ellos y le fue hablando mientras pasaba la fila.
  -animo que ya queda poco  un esfuerzo más y llegaremos a la falda de la montaña. Comer y beber mientras camináis. Un último esfuerzo os pido. Y así fue como llegaron a últimas horas de la tarde medio exhaustos a las estribaciones de la montaña granítica. Se desprendieron de sus bustos y se tumbaron cansados en el suelo y algunos sacaron comida...
  - el jefe también comió con su mujer. Y sus tres hijos.
  -mira papa lo que he hecho. Le dijo el más hijo más mayor.  Cogió lo que le ofrecía ¿Qué es? Dijo sin mirar.
    -una figura nueva. Esta la he hecho de una madera muy buena. El padre la miro y se sorprendió. Anda si es la figura de una persona; pero tú no sabes que representarse  uno mismo puede ofender a los dioses.
  - bueno no tiene por qué ser así. Dijo la mujer.  Ya sabes que los niños de ahora nacen muy espabilados y buscan cosas nuevas.
  -está bien les respondió. Quédatela. Luego consultaremos con los sacerdotes.
  -terminó de comer y miro el sol. Quedaba poco pero suficiente así que fue a buscar al que estaba vigilando entre las  rocas la entrada del camino
   -vente conmigo que vamos a inspeccionar la montaña.
   -se dirigieron hacia ella y comenzaron la ascensión. Al ir subiendo descubrieron algo... eran indicios que allí había vivido personas. Había en la orilla del camino restos de animales, cueros podridos  troncos partidos cuencos copas de barro, de todo había roto y desperdigo a lo largo de la bajada de agua y en sus orillas.
   -Siguieron ascendiendo y se encontraron con dos ciervos  husmeando por allí; y más arriba volvieron a encontrar trozos de vasijas de arcillas en algunas cuevas y oquedades.
  - El caballo se paró.
  - que le pasa al caballo.
   -no es nada serán las alturas. Y además como casi no hay luz.
  -se bajo del caballo y siguió a pie. Les quedaba muy poco para la cima.  Y en cuanto llegaron a ella miro hacia abajo y creyó ver algo increíble.
  -¡que extensión! No es eso un bosque de árboles.
  -¡eso parece! pero puede ser otra cosa porque apenas se deslumbra nada. ¡Sí! parece un valle incluso me ha parecido ver un reflejo
   -señor tenemos que volver. Se impaciento el soldado. Sin luz los  caballos pueden sufrir una caída.
  -llevas razón volvamos. Así que bajaron rápidos pero con precaución.
  -quédate aquí que cuando llegue al grupo te mandaré un relevo.
  -volvió rápido y mando el relevo  entro en su cabaña y se dispuso a dormir. Vio a su familia durmiendo como troncos. Ha sido un día duro pensó. Y se quedo durmiendo con la idea de haber encontrado un paraíso de los dioses.
   -al amanecer la aldea se puso en marcha y comenzaron a ascender por la montaña. El no comento nada a nadie de lo que había creído ver.
  --conforme iban subiendo el  calor y el sudor se fueron apoderando de ellos. Se fueron quitando sus abrigos de lana y poniéndose  las alpargatas de esparto trabadas fuertemente a la caña del pie.
   -conforme subían fueron viendo lo que el jefe ya había visto.    .
  -vieron las oquedades como cuevas, unas anchas, otras  estrechas. En su interior  amen las rocas habían restos de ramas, troncos  cortados y vasijas de barro entre restos de basura y vasijas rotas. Y que los animales y el agua habían esparcido por aquí y por  allá. Y  también vieron en lo alto de una cueva, entremetidas en unas rocas y desgastadas por el tiempo tres  cráneos grandes. A  uno de ellos le faltaban dos dientes
  - el grupo al ir viendo aquello  se inquietaba. Algunos niños lloraban  y las mujeres se tapaban los ojos.
  -los sacerdotes se adelantaron llegaron a la roca y bajaron los caneos rápidamente  para incinerarlos
 .- estos debían ser muy listos porque tienen la cabeza muy grande.  Dijo el más joven de los sacerdotes  deben de  tener una fuerza enorme.
  -sí, es un pueblo que ya se habla de él en nuestros escritos. Los Argáricos Le contesto el sacerdote más mayor. Que tenía  nariz aguileña.  Es un pueblo que se nombra en nuestros escritos muy antiguo que trabajaba el bronce.
  -mira aquí lo enterramos.  
  -los sacerdotes hicieron un hueco entre dos rocas  metieron algunas ramas y pusieron los restos. Para hacer bien el enterramiento de las cenizas fueron a recoger  trozos de vasijas, vasos y hoyas de barro
  -la fila de gente miraba con respeto y temor mientras iban pasando y daban gracias por poder disfrutar de la vida.
   - los sacerdotes pusieron los trozos junto a la ramas y le pegaron fuego.
  - uno de ellos comentó.  - Os habéis fijado que no llevaban nada de dibujos esos trozos.
  -sí ya me he fijado. Dijo uno.
   -en esto llegó hasta ellos el que escribía. Os he visto aquí y vengo a ver lo que pasa para tomar notas.
  Ha sido tres antiguos cráneos que estamos enterrando  le hemos puesto una cerámica que no estaba grabada eso no creo que complazca a los dioses. ¿Tú qué crees?.
   -pues por lo que he leído eran una gente muy primitiva y enterraban sus muertos en ánforas dentro de las casas.
   -no digas tonterías.

   - ¡ha no! Pues mirar aquí. Se acerco a unos  restos de piedras de una cabaña y con una piedra aguda empezó quitar tierra, apareciendo debajo una piedra a modo de losa. Veis aquí debajo está seguramente en una tinaja con sus objetos personales; que se yo, sus hachas, sus puñales, sus punzones; ¡si queréis podemos abrirla..
  -todos callaron..
 - mientras se apagaba el fuego tomó nota en su tablilla. Hicieron el enterramiento y se unieron al grupo que ascendía.  
    -el que entendía de plantas que iba de los primeros estaba intrigado con esos restos  a su alrededor. Paremos que quiero ver una cosa. Ni hablar. Le respondió el jefe precavido. Este no es el momento.  .
   -siguieron avanzando y  al doblar una  amplia curva en la subida  volvieron a ver otras  construcciones tiradas y más  huesos que los animales habían esparcido.
    el que entendía de hierbas intrigado se separo del grupo y observo de cerca los restos.
.   No hay por qué preocuparse. Les comunico a todos. Estos huesos llevan muchos inviernos por aquí.
   Aquellas palabras tranquilizó  mucho a la gente.
  -se lo debí permitir decir antes  Pensó el jefe.
.  - Al llegar a la cima el calor les apretaba. Pero cuando todos vieron el paisaje se les paso todo. Vieron en la distancia una llanura llena arboles  y  un rio con más árboles que siguiéndolo con la vista se perdía en la lejanía;  La alegría se apodero de todos. Tiraron sus cosas más pesadas dejaron  sus animales y se precipitaron ladera abajo. El jefe presintió un desastre así que se plantó delante con el caballo haciendo que fueran despacio.

    -cando llegaron a lo más llano y los sacerdotes fueron haciendo rezos y bendiciendo aquella tierra  y  entre  árboles y arbustos se fueron acercando al río. Su discurrir se perdía a lo lejos, El rio sin duda hacia que todo esto creciera.
  - algo conforme iban adentrándose les llamó la atención;  era un raro terreno de rocas qué salía algo de humo. Él ya había oído hablar de estos sitios
  - era un agua caliente que procedía de las profundidades de la tierra. Misterio de los misterios.
  -se fueron aproximando hacia el humo y vieron salir agua por algunas piedras que estaban partidas. El jefe de la tribu. De amplia barba esforzándose en soportar el calor metió la mano en el agua pero no pudo aguantar mucho y entonces pidió una vasija de barro, la lleno y la dejó que se enfriara.
  -Mientras los niños  correteaban y se perdían entre aquellas  piedras  humeantes, las mujeres cogían matas y flores sin perderlos de vista  por si había algún peligro  - Los hombres estaban esperando el enfriamiento del agua. Luego la probaron. Parece buena. Exclamo uno que tenía una cicatriz en la cara. - Todavía no lo sabemos. Le respondió el de poco pelo. Si esperemos que  sea buena. Les dijo  el precavido del grupo uno muy rubio. Porque estoy pensando si no habrá sido esta agua el que mato a los de arriba. A todos se les atragantaron esas palabras. Bueno pues ya hemos bebido esperaremos  a ver qué  pasa,  si es buena nos servirá para abastecernos. Pero también tenemos el río.
  -en esto llego una mujer corriendo. Mi niño no lo encuentro no sé donde esta, y cuando todos se pusieron en movimiento para buscarlo apareció llevando en  una cesta de esparto tres buenos peces. El jefe se acerco a él. Buenos pescados para hacer salazón
  -algún día serás alguien importante en el grupo. Le dijo. Y el niño sonrió orgulloso. Ahora oídme todos. Buscar a las mujeres y los niños y traerlos. Tenemos que recoger alimentos antes se oculte el  sol.  Buscar ramas encender fuego y poner las pieles para dormir.  Mañana  buscaremos un buen sitio para  hacernos las casas. Y luego un lugar  alto para hacer una muralla de piedra para defendernos de los ataques, si es que antes no aparece alguna gente que viva por aquí y tengamos problemas, como nos paso en tiempo de mis abuelos  en aquél lugar lejano.
  - este será un estupendo lugar. Dijo el que entendía de plantas para curar.     –Aquí tenemos  un gran y espacio para poder cazar y coger frutos tenemos mucha agua; estaremos bien y lo  defenderemos hasta la muerte. Porque  estamos ya hartos de tanto recorrer distancias  sin encontrar una tierra adecuada para quedarse, y además estoy seguro que aquí encontraremos buenas hierbas para curarnos. ¿os parece bien?. Un grito  de asentimiento se esparció.  


  - En lo que quedada de tarde recogieron alguna  fruta.  Incluso cazaron algo, y cuando anocheció se dispusieron a dormir en los pequeños tenderetes de cuero.
   Mañana se empezarán a construir casas resistentes de piedra y adobe  aquella tierra nueva y ajena.

El Asentamiento donde el agua brota
Desde el principio de los siglos.
Donde río y manantial unen sus manos
y q ue testigos fueron de su larga historia
Antes de los íberos y los Argáricos

Y después de árabes romanos y castellanos.

   -Viajando por la carretera de Archena en lo alto de un cerro hay una edificación que  parece un castillo rodeado de árboles pero es un palomar, y a su lado había un sanatorio

   En el palomar ya no hay palomas, sino tortolos y tórtolas, palomos y palomas que dejan sus inscripciones en las templadas  noches del buen clima de Archena.


 A la iglesia prerrománica de los baños


Se acerca multitud


A orar como otros años


Con cercana prontitud


¡El pasar de Nuestra Señora de la salud! 

  -Nuestra Señora de la Salud: Aquella misma señora que hace ya muchos años rezaron  unos navegantes portugueses: Qué  a punto de naufragar invocaron a nuestra señora y una luz vieron en la tempestad que apaciguo el temporal pudiendo salir ilesos. 
  -A esa misma Señora que fue vista por dos pastorcitos_ y que llevaba un niño en sus brazos.; y entonces  ella se acerco a ellos y les pidió agua del cántaro que llevaban. Se la dieron y al volver a abrir de nuevo los niños en su casa el cántaro, vieron que el agua se había convertido en deliciosa leche.
   -A esa Señora que según afirmaba un niño también ella le había curado.
Nuestra señora de La Salud.
Esa Señora al pueblo va llegando
Los devotos le van acompañando
Las mujeres le van rezando
Y ella a todos les va cobijando.

  - Inagotable manantial donde brota agua con lodo, yodo sulfuroso  que rejuvenece la piel y  a la belleza de da nivel y al cuerpo le da gozo..
  -Los romanos ya la aclamaban y la hicieron famosa en los tiempos de Augusto era un sitio de salud bordeado por un río placido de aguas limpias. Aunque el agua del balneario no es la misma que la del río.
  - Los decuriones Caio Cornelio y Carito ya lo atestiguan en una lápida  inscrita de piedra de pedernal.
   -Vengan cuanto quieran. Quedaran nuevos
De Archena; el templo y su gran cúpula de peculiaridades murcianas distinguen a su iglesia parroquial con fondos ovales de la iconografía cristiana la orden hospitalaria que dominó más de cinco siglos domino el señorío.
Sierra de Ricote y .Cajal



Vino el cuerda. De viñas:
Salcillo. Ver y admirar
En la ciudad de las siete villas,
Ella te llevará a soñar.

  -Villa  de las siete villas  llena de fruto estas  y también una soberana montaña donde San Sebastián tiene su lecho.
  - Fue San Sebastián, acusado por los romanos y atado
Desnudo lo asaetaron atado a un tronco.
   -Al día siguiente cuando fueron los cristianos a por su cuerpo vieron que aún estaba vio y lo curaron.
   -El sin querer abandonar el lugar apareció en el templo de Hércules acusando al Emperador de martirizar cristianos.
   -El emperador lo volvió a prender, lo apaleo hasta la muerte y lo tiró a la Cloaca Máxima...
   -Lo buscaron los cristianos hasta hallarlo y enterrando su cuerpo en lugar Santo.


 

   -Es Ricote la ciudad de las siete villas donde todo brota; la aceituna amarilla, la flor del almendro.
  -Por la mole granítica siguiendo su camino de frescura y huerta se encuentra uno  En Villanueva del río Segura.
 En e
lla  una torre de estilo neoclásico  en la plaza de la constitución;  y una hermosa iglesia de torres gemelas nos espera 


 y en  su interior la Virgen de la Asunción que ordenaba las casas de los pobres sin saber el que la veía de donde venia ni como se marchaba..


   -Está recorriendo  en la calle la fiesta del niño y Cristo resucitado,  ambos van a su encuentro.  El niño de apenas años sonríe a la gente con agasajos. Aún no sabe que este encuentro se celebra en Villanueva desde hace más de doscientos años.
   -Y ya la gente aplaude y más se eleva su fe.
   -Meses más adelante llegara otra fiesta. La de San Roque.
   -La gente se vestirá con su traje regional  prepararan la  paella de grandes dimensiones. Tendrán preparada la traca, y en este pueblo tranquilo a orillas del río Segura mucho más a San Roque ensalzarán.             
       -San Roque que  fue de familia acomodada lo dejo todo y vivió como. ermitaño  alimentándose de lo que recogía y al verlo así los demás tomaron como modelo.
  -Cuando termino  la fiesta del niño nos fuimos al estupendo alojamiento.
  -Al día siguiente  salimos de  Villanueva y seguimos  pegados  por la mole granítica



llegando así a Ulea.
  -Llena está de historias de llantos y alegrías y estupendos cuentos uleanos.   ,
,
  -Sitio estratégico y punto para defensa del rio Segura

   -Allí está la Iglesia de San Bartolomé. ¡Qué bonita la procesión que bonita se ve cuando irrumpe por las calles la procesión de San Barto tomé
  -San Bartolomé,  uno de los discípulos al que se le apareció Jesús.
el que difundió la religión católica en Armenia y también vio la ascensión Jesús en el cielo.
   -La iglesia  de San Bartolomé se erigió sobre la antigua mezquita. De allí vamos a la capilla de San Antón y vernos su  Santo Patrón San Antón. Que tanto amaba a los animales.  - Veremos construcciones árabes  como el túnel excavado por  los moros que se entra por la pila de la reina donde ella se bañaba con esa temperatura siempre agradable y sombreada por palmeras y grandes piedras.
 - Cientos de metros de pasadizo excavado en la montaña nos lleva por su interior a un cortado y  una sima donde se oye un  sonido espantoso; un viento violento un lugar de encantamiento.
   -En el exterior, el luminoso sol; viñedos de uva, trigo, almendros higueras en flor. Y por el Extremo orientar.

De Ulea camino a Ojós
El  salto de la novia;
Muerte de amor final
En la sierra de Cajal.

. Trágica historia de una mujer principal por la pérdida de su marido muerto por la daga de un moro de Granada.

Estrecho del Solvente.
Tierra de frutos y verdor
Y una manta de color que me llevará a Ojós.

 Ojós. El corazón del valle de ricote.
¡Que brote la aceituna manzanilla!
¡Que la flor del almendro  brote!
 En la  fértil tierra de Ricote.
   -Pueblo este que se sublevo en tiempos Aben-Hud  en contra de los almohades y organizo algunas algarabas  contra los cristianos saqueando y cautivando todo lo  que encontró
   -y en Ojós realzan  a San Agustín de ojos negros y abundantes rizos  muerto por un ataque de los vándalos .
  - comparten su buen vino de Ricote  añejado por su tremenda historia, y endulzan  sus paladares despacio con el estupendo sabor de sus bizcochos borrachos que son únicos y de Ojós.
   -podemos oler el valle; intuir y presentir el agua de río Segura por acequias y como  se acercan los animales para beber.
  -discurren las acequias entre puntiagudos  y pedregosos parajes. Y mirando hacia arriba;  en lo alto sobresale el  pueblo de Ricote que
 da nombre al valle.
   -conforme vamos subiendo  una policromía  de color nos llega. Y acercando más llegamos a la plaza de Santiago.

 Podemos ver el palacete de los castellanos de valiosa rejería y  gran balcón central.
  - muy cerca la casa de la Orden, amplia; con claustro, patio jardines de alago entre columnas de piedra que desde el siglo doce al diecinueve  fue gobernada por la Orden de Santiago. Y a un expresivo san José Salcillo
  - más a lo lejos está el castillo de Alarbona  donde se ve todo el valle. Desde allí el rey y caudillo de la Taifa de Ricote Abenhud que le había arrebatado el castillo a los almohades africanos. Se defendía de cualquier ataque.
   -Abenhud. Le ofreció a Arramimí; su protegido. Una cristiana capturada para su guarda, pero Arramimí se enamoro de ella.
Al enterarse Abenhud  partió hacia Almería dispuesto a castigarle, pero fue envenenado en el banquete de llegada.
  - Histórico valle de Ricote.
  - Desde la iglesia de San Sebastián; desde esta soberana montaña granítica puedo oír tu fiesta de cohetes lanzados al aire  y gran tracada única en su afán y en honor al santo Patrón.
Rio Segura, sierras. Cañada Gil cañada de paso de ganado. Por el sendero del puerto del Caballo hago ruta camino hacia la Bermeja; voy por el camino del paseo del moro y luego  por amarangos que paso, y se dejan. Mientras me veo envuelto  en la viveza de su entorno y en sus colores pronto  llegaré a sus casas, a sus calles y la conoceré y allí ¡del artesanal vino de  La Bermeja beberé!.
 Y de Ricote a Blanca de la peña negra.
Suena la campana. Y a la huerta llega;
¡Qué alegre su toque…!
¡Qué la gente contemple el valle de Ricote!
   .y al Oeste.  Blanca.


   -desde  dónde empieza la historia de Blanca de la peña  negra . Quizá desde la prehistoria. Yacimientos Íberos hay en la Loma de La Tendida.
   -junto a la Peña negra; que forma la ladera de la montaña compuesta por  roca feldespática de origen volcánico. Fue construida la fortaleza Árabe  para dominar la parte alta del rio Segura.
   .el río  llega allí entre agudos picachos  que parece que lo anulan
 pero él  blandiendo su triunfo sale entre las estrechas pareces de roca con su preciada carga y va haciendo un vasto verdor;  una  rivera,  de acequias y arbolado camino de Blanca .
   -más adelante está la fortaleza que observa  y recuerda su historia más violenta. Cuando pasó  en un fuerte asedio  a ser arrebatada  a los árabes por los caballeros de la Orden de Santiago.
   -casi pegada a la peña negra esta la iglesia de San Juan Evangelista. Y desde la calle observo el campanario. Y en su interior la talla de la Virgen de  los Dolores:  y otra de Cristo amarrado a la columna.
   Luego  salgo a la calle  y a su plaza. Observo caserones  con elegantes balcones de hierro forjado y bonito enrejado.
  -en Blanca nació Pedro Cano  allí está su museo  , donde el río hace su camino..
Aguas que vienen y se alejan, aguas que están y ya no están. Y contra la corriente o cauce natural del río,  remonto hacia el norte. Río  arriba camino de Abarán  y de la sierra del oro a poner en su libro una petición de paz a la patrona de Abarán  la Virgen del Oro .
CI E Z A

   Atravesar la dura meseta castellana y llegar a Cieza; es una perla encontrada

   Historia y artística ciudad y rio que cambia de

dirección porque Cieza te volvió suresteño y te lleva de la vega alta a la media entre valles trasversales  bajando en tu  singladura  desde la estribaciones del alto Segura


   Y casi rozas   una preciosa llanura de piedra situada entre altos montes, y separada del rio Segura,  allí  se construyó la muralla lindando con la sierra de Ascoy. Bañada por el rio Mundo, y por aguas que se dejan caer .por las ramblas y cauces ciezanos creando fértiles hueras de olivares y variedad de frutos.

Albaricoqueros que nacen por doquier.

sustancia de agua tierra y vergel

de la estupenda oliva ciezana,

del melocotón del placer .

   En el casco viejo; Desde la alta e  imponente atalaya  con un cielo chispeante se puede ver Cieza y la curva del rio, la torre de la iglesia donde ahora suena la campana

El milagro de San Bartolomé su patrono, que un día sudó tanto

Que desde entonces le llamaron los cinco sudores del Santo.


NO SE QUE PASA, PERO TENGO PROBLEMAS CON EL BLOG SI ESTO NO SE SOLUCIONA PONDRÉ O SEGUIRE CON GMAIL










 
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Y en Cieza sorpresas que se obtienen.


Iglesias y templos
de agradable y sutil arquitectura
Y paseos que añadimos

Todo y tú eres una y  eres sin duda la perla del Segura.


Habría tanto que contar; de su alegre cielo

De su romería al pasar

¡De la virgen del Consuelo.

. Me adentro por sus calles y puedo ver un hermoso caserón con dos escudos y buena verja. Más  adelante el convento. ¡Y qué bonito es el casco viejo!.

Iglesias fuentes y conventos,

Calles mercados placetas

Pueblo con argumento

Con historias de metas

 La ermita de San Bartolomé patrón de Cieza. San Bartolomé discípulo de Jesús. Vivió ajeno a las complacencias de este mundo y ejercito el bien que le venía de los placeres celestiales y la gracia del auxilio divino.

   Huerta de Cieza, camino de Calasparra. Huerta, ríos, altos montes.

Atalaya de altura.
¡que dulzura escondes!

Donde el río se despereza
En los montes que te besan ¿y por que a todos embelesa 

el bello vergel de Cieza!

,El peñón agudo se estrecha. Estrecho de Almadenes, donde  el Segura ruje en su caída. Calasparra que esta cerca. Tierra

,de arroz. Tres ríos te bañan  
    En la sierra del molino. En los abrigos de pozo, allí están tus pinturas rupestres, en un espacio escondido. Arte creado en la península Ibérica,        Después el río baja calmado y nos ofrece unas tranquilas y famosas playas.
Se puede  ver el influjo de los ríos; y para recreo de la vista, verdes  praderas de arroz.
   En la orilla del río; el Santuario  de la Esperanza excavado en la roca vertical, con sus espaciosas terrazas y barandales cubiertos de jardinería que comunica con un amplio arbolado que llega y traspasa el río. Todo ello adornando a la Virgen que todos llaman la Pequeñica.
   Carretera arriba Calasparra. En la calle mayor de estilo Neumodéjar, esta la torre del reloj, cuyas campanas resuenan en todo el término municipal.
  Se puede ver en la calle el templo parroquial y caserones antiguos. La Encomienda, hoy mueso arqueológico.   La casa del granero donde se envasa el arroz, y en la misma calle mayor el caserón de los Piñero con balcones de buena forja y fachada de color rosa.
   Vamos a la Corredera. El paseo donde se puede observar  la iglesia de la Merced, y la vista del Estrecho del Convento. Y también  ir a ver la carpa plegable del inventor Emilio Pérez Piñero,  que construyo sus estructuras metálicas y desmontables para construir la cúpula del museo de Dalí. y    así, entre deliciosos paseos, entre fuentes, flores plazas y placenteros sueños,  esta la delicia y el querer de los calasparreños. 













Por la orilla del río, buscando su nacimiento,
 fué cuando .

     La luna frunció la oreja en el momento que  vio a la comadreja que iba con mucho cuidado bordeando un viejo fresno. Y la comadreja le levantó la ceja y la miro.
    De que te sorprendes refulgente luna.
     Porque me hace  gracia  tu enorme sigilo, tienes miedo a que acaben contigo.
     Soy comadreja vieja y con astucia he llegado,  y mira mi cola crees que es de medio metro, pues es más larga, soy un carnicero mutélino y quien se ponga por medio lo liquido…, tú, porque eres un misterio y estas muy lejos. ¡Pero calla!, qué ya rastreo algo.
     Se metió entre juncales, rosales y cañaverales, llegó a río y oyó un chapoteo que se alejaba. Retrocedió al viejo fresno, cuando de este cayó una rama con un hondo chasquido, y le pilló su larga cola.
     Atrapada toda la noche y parte del día, cuando vio llegar a dos seres altos vestidos iguales cerró los ojos, pero nada pasaban, la liberaron de la rama

     Abrió los ojos dispuesta a no morir sola, pero de pronto pudo mover la cola retrocedió, les amenazó, les asustó para prevenirles, que a una comadreja nadie le moja la oreja.     

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